Poker de Cristiano ante el Girona
Partido loco donde casi se ve un gol cada diez minutos en el Santiago Bernabéu. El Real Madrid ganó 6-3 al Girona.
El Madrid es un equipo completamente nuevo con Lucas Vázquez, Kovacic y Asensio, y sin Modric, Bale e Isco. Es más directo y más arriesgado.
El Girona saltó al césped del Bernabéu sin complejos. Su presencia cerca de los puestos europeos no es ninguna casualidad.
Es el equipo revelación de la temporada. Con jugadores de gran categoría como Portu, Stuani o Johan Mojica, descuidado en defensa pero muy imaginativo en ataque. Un equipo que fue un quebradero de cabeza para el Real Madrid.
El primer equipo en marcar fue el equipo merengue con diez primeros minutos que fueron completante verticales gracias a la visión de Asensio, la mejor versión de Benzema, el hambre de Cristiano y la velocidad de Lucas y Kovacic.
Tras un disparo de Cristiano, un mano a mano de Lucas tras un gran pase de Benzema que no llegó a batir al portero del Girona, la respuesta de Borja García con un lanzamiento lejano que salvó Keylor; Cristiano acertó con un zurdazo de puro delantero que abrió el marcador.
El gol merengue no arrugó al Girona, que puso toda la carne en el asador a través de Mojica. El jugador colombiano fue un completo reto para Carvajal, que respondió con otro rompecabezas para el extremo gironí.
Portu también tuvo sus ocasiones en la portería de Keylor Navas. A punto estuvo de hacer gol en una ocasión rápida por la banda derecha.
El autor del empate catalán fue Stuani al cabecear una falta botada desde la derecha por Àlex Granell. Golazo de manual de cabeza digno de poner en los libros de enseñanza de este deporte.
Cristiano hizo el segundo tras volver de los vestuarios al aprovechar una gran acción de Benzema, que habilitó a su compañero para que en el mano a mano con Bono hiciera el segundo suyo y del Real Madrid.
El Madrid se desató con el segundo tanto y se convirtió en un equipo imparable.
Los goles llegaron casi seguidos: el primero, de Lucas Vázquez tras un pase de Cristiano; después, a 25 para el final, con una llegada de Asensio que dejó a Benzema para marcar. El francés se lió y falló el gol pero Cristiano llegó para recoger el rechace y llegar así a los 3 goles.
El Girona, ya agotado, disfrutó de otro cabezazo de Stuani, que aprovechó un descuido en una falta para redondear un marcador. Lo alargaron aún más Bale y Juanpe. Cristiano hizo el cuarto.
En la locura de goles y de partido, ganó el Real Madrid, ganó el fútbol, ganó Benzema y ganó Cristiano.
El autor del empate catalán fue Stuani al cabecear una falta botada desde la derecha por Àlex Granell. Golazo de manual de cabeza digno de poner en los libros de enseñanza de este deporte.
Cristiano hizo el segundo tras volver de los vestuarios al aprovechar una gran acción de Benzema, que habilitó a su compañero para que en el mano a mano con Bono hiciera el segundo suyo y del Real Madrid.
El Madrid se desató con el segundo tanto y se convirtió en un equipo imparable.
Los goles llegaron casi seguidos: el primero, de Lucas Vázquez tras un pase de Cristiano; después, a 25 para el final, con una llegada de Asensio que dejó a Benzema para marcar. El francés se lió y falló el gol pero Cristiano llegó para recoger el rechace y llegar así a los 3 goles.
El Girona, ya agotado, disfrutó de otro cabezazo de Stuani, que aprovechó un descuido en una falta para redondear un marcador. Lo alargaron aún más Bale y Juanpe. Cristiano hizo el cuarto.
En la locura de goles y de partido, ganó el Real Madrid, ganó el fútbol, ganó Benzema y ganó Cristiano.